jueves, 8 de marzo de 2012

Demonio


Por Argentea Martín.


Aquella noche Margo le había prometido a sus padres que les ayudaría a hacer la cena de Acción de Gracias; estaba caminando por una calle donde años antes, había sido asesinadas varias mujeres; pero claro, Margo no podía saberlo porque era una muchacha supe protegida.

Aquellas mujeres eran prostitutas y como ya supondrán, los padres de Margo no querían que su inocente hija supiera nada de eso. Ellos eran gente decente ¡Pero por el amor de Dios!...pero volvamos a Margo.

Margo estaba pensando en la maravillosa cena de Acción de Gracias que harían ella y sus padres, llevaba todo lo necesario: pavo, arándanos, etc. Pero, de pronto, Margo oyó pasos detrás de ella y un rítmico "suiss, suiss”, que sonaba. Volvió la cabeza y no vio a nadie; pensó que serían imaginaciones suyas; empezó a andar de nuevo y escuchó lo mismo, pero esta vez más rápidamente.

Sin saber porque empezó a correr más y más deprisa; surgió una sombra detrás de de ella y empezó a perseguirla por la estrecha calle. Margo lloraba de pánico, la sombra la cogió por un tobillo y la hizo caer, nunca había deseado tanto sangre humana; pero, comprenderán que cinco años sin comer son muchos años.

La sombra se irguió ante Margo; pero, no era una sombra cualquiera, era el "asesino del callejón de las prostitutas" que desnudó a Margo y la violó; cuando hubo satisfecho su sed de sexo, bebió su sangre… y desapareció.

A las 8:00 de la mañana del día siguiente, los empleados del camión de basura encontraron el cuerpo de la pobre Margo; desnuda, violada y descuartizada. Llamaron a la policía, que murmuraban para sí la suerte corrida por la muchacha; sus padres se enteraron poco después; su madre tuvo que ser ingresada por un ataque de histeria y su padre se desmayó. Las investigaciones duraron tres meses, pero la policía no pudo encontrar al culpable de la muerte de Margo Stockholm.

Una semana después; Annie Wicks caminaba por el mismo callejón a las 12:00 de la noche del último día de su noviazgo con John Edgecombe; Annie iba pensando en la patada que le había dado a Johnny en sus partes, asi que no vio al asesino cuando la agarró por las piernas y la tiró de cabeza al suelo. De Annie solo quedó un zapato; lo demás había sido convertido en una pulpa sanguinolenta. Esta vez, la policía tampoco encontró nada. El monstruo se reía para sí; estos monos nunca me encontrarán; pero mientras el monstruo se enorgullecía de su astucia; unos jóvenes expertos en demonios investigaban sobre los asesinatos de las prostitutas, Margo y Annie.

Este grupo estaba compuesto por dos chicas y cuatro chicos expertos en exorcismos, demonios y sectas. Tras muchas investigaciones; los chicos decidieron que las chicas fueran el cebo para la criatura. Las chicas legaron a la calle y empezaron a caminar, hacía frío en ella; mientras, los chicos las seguían. De pronto, oyeron un rugido que surgió del más hondo del callejón; las chicas empezaron a correr; pero cuando ya iban a alcanzar la salida, una de ellas tropezó y cayó hiriéndose en la boca. Entonces, el monstruo se echó sobre ella y la mató. Los otros no pudieron hacer nada por ella.LA policía tampoco.

Los chicos del grupo idearon otro plan; se pusieron en contacto con la policía; y a las 10:00 de la noche siguiente fueron en busca del monstruo. Llegaron al callejón justo cuando lo hacía la policía; la chica que quedaba del grupo y una mujer policía entraron en el callejón y oyeron los ruidos del monstruo acercarse; pero, en ese momento, los otros policías le echaron una red y pudieron ver que era una bestia horrible; con los ojos rojos, la piel leña de arrugas y era negro, muy negro. Pero consiguió escapar y correr hacia su guarida; los chicos y la policía corrieron detrás de él; llegaron a una casa semi-derruida que contenía los restos putrefactos de infinidad de víctimas.

Los chicos hicieron un exorcismo y el monstruo desapareció; la policía hizo un informe escalofriante; en la guarida de aquel bicho había más de veinte mujeres sin identificar, aparte de algunos trofeos del monstruo: la ropa de Margo y el cuero cabelludo de la otra chica del grupo. Había sido el fin de aquel monstruo sobrenatural, horrible, que había venido del infierno a matar mujeres inocentes.


Fin.

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